Adaptación de Antígona
de Sófocles, por José Watanabe, basada en el mito de la antigua Grecia, con Ana
Yovino y dirección, sonido y luces de Carlos Ianni. Escrita hace más de 2000 años
en Grecia, cuna de la democracia. La primera representación data del año 441 a.
C. Se sigue reponiendo debido a los temas fundamentales que toca: el rol de la mujer,
la definición de justicia, la cuestión de la divinidad, entre otros.
Por Ana Abregú.
Es bello
obtener la realeza
como premio
a la justicia;
pero es
más bello aún
preferir
la justicia a la realeza.
Plutarco
Dos fuerzas representadas por un hombre con
todo el poder, Creonte (Ana Yovino), y una mujer, Antígona (Ana Yovino),
dirimen el rasgo distintivo de la tragedia en posturas de razones opuestas, bajo
la «palabra de los dioses»; dos caras del mismo gesto de hacerse de la ley, bajo
el designio de entidades metafísica.
Polinices –en griego: pendenciero, Polis,
que refiere a la noción de estado, en el sentido de voluntad del pueblo– y Eteocles
–étéos: "verdadero"y kleos: fama, rumor, gloria–, hermanos de Antígona
se han matado entre sí; el primero atacando a Tebas, el segundo defendiéndola. Las
relaciones entre los personajes de la tragedia, hermanos, tío, hijo del tío, consolida
la efectividad de la simbología de las situaciones endogámicas como modelo de tensión
entre razón y conveniencias; Creonte, el rey, elige castigar el atrevimiento de
Polinices negándose a enterrarlo mientras que honra a Eteocles con honores y sepulcro.
Los elementos en juego son el desafío a ese designio, por parte de Antígona que
hará lo necesario para tratar de enterrar a Polinices y el rey que ha emitido un
decreto en contra de ello.
La tierra, la madre, el reino de Hades se revela
como una aspiración para la vida en ese otro momento que es la muerte, otro estado
del ser, con el que Antígona dialoga, le debe el acto de enterrar al hermano, mientras
Creonte, por el contrario, el acto de dejarlo pudrirse sin entierro. En la Grecia
antigua los ritos funerarios aseguraban que las almas de los difuntos llegaran al
Hades impedidos para volver y atacar a los vivos. Morir sin sepultura los condenaba
a ser comido por los pájaros y las bestias, el alma torturada y vagando sin fin.
La obra comienza
con la narradora y tres elementos: sogas colgadas en la barra de luces como toda
utilería; así veremos que aunque son las mismas en grosor y luz directa, que ofrecen
la ilusión de conexión con el arriba (Olimpo, Zeus) y el abajo (Hades) son el símbolo
de origen místico, común en la cintura de las túnicas en épocas de la antigüedad.
Una de ellas, termina en un cíngulo, típico de toga de sacerdotes; la escena se
presenta contundente intermediada por la luz.
La ductilidad en
el uso del elemento es notable; la actriz la usa para representar la característica
etérea de Antígona; se mece en una de las sogas –el cíngulo como sostén y apoyo
de fuerza motriz, una interesante resolución que sobreimprime el uso alegórico–
y desaparece las impresión de solidez para volverse fluida, tenue, delicada, una
mujer de la época: insignificante y ajena a la importancia de los asuntos de los
hombres; así como cuando en representación de la pared de la cueva donde encarcelan
a Antígona se apoya en otra de las sogas y se vuelve la roca de las paredes de una
cueva: el mismo elemento en funciones opuestas; liviandad, solidez; como también
los nudos para hacer y deshacer pactos durante las cavilaciones de Creonte –que
en esta época, remite a los nudos de la unión fraternal que se reproduce en los
ritos de las logias Masónicas.
Destaco la contundencia
actoral en el uso de las manos de Ana Yovino y las luces; Antígona meciéndose en
la soga (manos de
Ana Yovino), Antígona abriendo
las puerta del Hades para enterrar a Polinices (manos de Ana Yovino), Antígona apresada (manos de Ana Yovino), paredes de la cueva (manos de Ana Yovino), Creonte colérico (manos de Ana Yovino), aparición de Tiresias (manos de Ana Yovino) el adivino que advierte a Creonte el enfado
de los dioses por la injusticia.
Creonte, guardia, mensajero, adivino, hermana
menor de Antígona –Ismene–, Hemón –hijo de Creonte y prometido de Antígona–, queja
del pueblo, polifonía de voces con que Ana Yovino desovilla la tragedia que repone
este clásico de Sófocles que enfrenta dos aspectos fundamentales: el cumplimiento
de leyes, representadas por decretos del Rey, y leyes de dioses; ambas basadas en
un deber ser, que refiere a lo público –el pueblo– y a lo privado –el deber familiar.
El cuerpo insepulto de Polinices, objeto que
detona la crisis, pone en juego decisiones, juicios, discernimientos, elecciones
que reponen una maquinaria de eventual cambio en el rol de la mujer y el impacto
de su determinación.
“Qué tiempos serán los que vivimos, que es
necesario defender lo obvio.”, dijo Bertolt Brecht; qué es lo obvio en esta obra:
tanto Antígona como Creonte delegan la razón en la divinidad, la diferencia antitética
está en las intenciones; Antígona del lado de la compasión, por mandato divino;
Creonte del lado del poder, también por mandato divino. A los ojos de nuestra época:
una mujer empoderada que pone en juego la vida, voz y acción; en Sófocles un rasgo
de provocación, mujer contra el poder, ambos esgrimiendo las razones de la divinidad.
Excelente texto de Sófocles con artificios
poéticos que halagan el oído, acompañado de recurso como instantáneas; estética
despojada y profunda identificación entre personajes y actriz que representa esta
compulsa alegórica entre el poder del pueblo y el de la monarquía como derecho divino
mediada por el relato. Enorme potencia actoral de Ana Yovino.
#teatrocaba #teatroindependiente #teatrooff #teatroalternativo #teatroargentino #teatrobuenosaires #teatro #dramaturgia #CELCIT
Ficha Artística/Técnica
Unipersonal:Ana Yovino
Fotos:Soledad
Ianni
Diseño cartel:Agustín
Calviño
Musicalización
y diseño de luces: Carlos Ianni
Escenografía
y vestuario: Solange Krasinsky
Dirección:Carlos Ianni
Moreno 433
Ciudad de Buenos Sin intervalo
Duración: 60 minutos
Este espectáculo cuenta con el apoyo del Instituto Nacional
del Teatro
CELCIT. Temporada 2006-2007-2013-2014
Aires, Argentina
Tel: 4342-1026
No hay comentarios:
Publicar un comentario